Existen dos tipos de brindis: uno al inicio de la comida y otro al inicio del postre.

El primero se ofrece para dar la bienvenida a todos, el anfitrión se mantiene sentado. El segundo, el anfitrión se pone de pie y ofrece el brindis al invitado de honor.

  • Al momento de hacer el brindis, asegúrate que todos tengan una bebida para hacer el brindis.
  • Ponte de pie y solicita la atención de todos.
  • Levanta tu copa, sostenida por tu mano derecha y extiende el brazo delante de ti.
  • Si el brindis es en honor a un invitado, asegúrate de mirarlo a los ojos mientras expresas las palabras sobre él o ella. De lo contrario, di las palabras por las cuales deseas ofrecer el brindis. Recuerda mirar a los ojos de las personas que tienes alrededor.
  • Cuando hayas terminado de hablar, los demás se levantarán, alzarán sus copas y las acercarán. Nunca se deben chocar las copas.
  • Como es imposible acercar tu copa a las de las personas que tienes más lejos, mira a cada una a los ojos y a la misma vez alzas tu copa.
  • Si eres el invitado de honor, no olvides hacer un breve brindis por el anfitrión al final. Esta es una forma de mostrar tu gratitud.
  • No bebas para ti mismo, si el anfitrión ofrece un brindis a tu nombre no te toca alzar la copa ni tomar hasta que todos hayan bebido y puesto sus copas en la mesa. De lo contrario, sería como aplaudirte a ti mismo.
  • Si a la hora de hacer el brindis tu copa está vacía, alza tu copa y brinda, luego finge tomar un sorbo de la copa. También está permitido hacer el brindis con una copa de agua.

 

Dato interesante: Existen distintas versiones sobre el origen del choque de las copas. Una de ellas es que antiguamente se acostumbraba a chocar las copas para que subieran las burbujas de la bebida. Según otra versión, el objetivo era salpicar y mezclar el contenido de ambas copas, entre monarcas y nobles, para demostrar que la bebida no estaba envenenada. También que los comensales levantaban y golpeaban sus copas para atraer la atención de los sirvientes para que les sirvieran más bebida. Y por último, que el choque de las copas alejaba los malos espíritus.

Hoy día es suficiente con hacer el gesto hacia el resto de los comensales, alzando levemente la copa. En este caso, la anfitriona te lo va a agradecer pues su copa no correrá el peligro de terminar rota. Si alguien te ofrece chocarla no le hagas el desaire, corresponde el gesto. Pero no es necesario recorrer toda la mesa chocando cada copa.

Es costumbre también a la hora de brindar, decir alguna palabra o expresión como salud, cheers, proischt, saude, salute, santé, etc.

¡Salud!