los eventos

Lo que no se dice de los eventos

Asistimos a eventos con la idea de pasar un buen rato y compartir entre amigos. Pero a veces suceden situaciones que nos contrarían y acaban con el disfrute del momento. Como aquella cena diplomática, celebrada en un jardín, donde se activó un aspersor del sistema de riego (sprinkler) dirigido hacia mí y me empapó todo el vestido de agua.

Gracias al auxilio de los demás comensales, se pudo disminuir la fuerte presión del agua atando un pañuelo al sprinkler. Ningún anfitrión del lugar se me acercó a ofrecer su ayuda o disculpas.

 

Por fortuna con poca frecuencia nos encontramos en situaciones tan incómodas y embarazosas como esa, pero puede suceder que simples detalles nos quiten no sólo el entusiasmo sino hasta el apetito. Aquí algunos puntos que debemos tomar en cuenta cuando asistimos a un evento:

 

  • Los tacos. Qué martirio a la hora de hacer una fila donde se brindan tacos. ¡No intentes ensamblar el taco mientras estás en fila! Coloca una porción de cada ingrediente en tu plato (suficiente para los tacos que te comerás). Luego tómate todo el tiempo “armando” el taco a tu gusto, pero en tu espacio.
  • Doble inmersión en dips, salsas o fuentes de chocolate. Es indebida

la doble inmersión de galletas, chips o malvaviscos desde el plato común para todos pues bacterias de tu boca se pueden transferir a un alimento cuando se toma un bocado con algo ya mordido. Puedes servirte los chips y una porción del dip en tu plato. Una mejor y más saludable opción es hacer shots de estas pastas o salsas en vasitos individuales.No se habla encima de la mesa del buffet. Al hablar se expulsan partículas de saliva que pueden caer encima de los alimentos. Hay personas que no paran de conversar mientras hacen la selección de su comida.

  • ¡Qué gallinero! No saludes ni converses mientras se estén ofreciendo las palabras del acto. Tampoco distraigas al invitado que intenta escuchar. Últimamente da vergüenza asistir a eventos en el que una parte del público no para de hablar en un momento que sólo debe escuchar. Esto es un irrespeto a los anfitriones, organizadores y demás invitados.
  • ¡Pasa el maní! Evita quedarte con una de las bandejas de picaderas, pasapalos o bocadillos en las manos. Alguien te va a observar y a tildar de glotón, recuerda que es un brindis para todos.
  • No olvides tu celular en la mesa mientras conversas o bailas. Está en aumento el robo de celulares en los eventos, no importa el nivel del lugar.
  • No te pares a conversar en las puertas, obstaculizas la entrada y salida del evento.
  • Si te quedas de pie en un evento, mantente a los lados o en la parte de atrás y no obstaculices la vista de los que llegaron temprano y están sentados.

  • NUNCA contestes el celular en medio de un evento. Por más bajo que sea tu tono de voz, distraes a todos con tu conversación. Mantén el timbre apagado.
  • Aún en los eventos más sencillos (almuerzos o cenas en la casa) es necesario que el anfitrión exprese unas palabras de bienvenida o en homenaje al invitado de honor. Estas pueden ser unas palabras breves al inicio de la comida que finalicen con un brindis. El homenajeado suele dar su discurso al final de la comida, en el momento del postre. Estas palabras le dan sentido al evento, es algo así como la “tarjeta que acompaña al regalo”.
  • En un evento empresarial todo miembro de la empresa que invita es anfitrión. Por lo que cada uno es responsable del buen trato a los asistentes, de dar prioridad a los invitados en el buffet y de compartir y mantener conversaciones con los invitados que se encuentren solos.
  • Anfitriones novatos. Al seleccionar personal de protocolo para un evento no lo elijas sólo por su cara bonita. Su papel principal es dirigir y acomodar a los invitados especiales a sus asientos reservados. Es muy desagradable para las personalidades, llegar y ser totalmente desconocidas y desatendidas.
  • Asientos y mesas reservadas. Nunca ocupes lugares reservados para otros invitados. Evita una situación embarazosa o desagradable para ti y para el otro invitado. Nunca modifiques la programación del anfitrión.
  • Sé tolerante si han tomado tu asiento (deja que protocolo resuelva esa situación), si no te agrada la comida, si hace calor en el lugar, etc. Esto es, si se trata de una invitación, no de un evento que has pagado. Siempre habrá una oportunidad de manifestar, de manera discreta, tu inconformidad al anfitrión u organizador o de enviarle una comunicación posterior al evento.
  • Sé agradecido. No te vayas del evento sin dar las gracias al anfitrión por la invitación y decirle algunas palabras cordiales. Posterior al evento, puedes también, escribir una nota de agradecimiento y elogios a los organizadores y/o anfitriones.

Si vas a realizar un evento, no olvides un espacio para parqueo u ofrecer valet parking. Si es en un edificio de apartamentos haz arreglos con los vecinos para ofrecer espacios extras de estacionamiento. Tus invitados agradecerán esa cortesía.